Adquirir un inmueble siempre será una buena inversión. La rentabilidad y el incremento del valor comercial son unas de las tantas razones para tomar esta decisión.

Estas son algunos de los aspectos que incrementan año a año el valor de tu inmueble.

 Ubicación estratégica y alrededores

La zona donde se encuentra el inmueble es uno de los factores más importantes. Las obras, accesos a vías principales, zonas de comercio, centros financieros y todo lo que se encuentre en el entorno.

Acabados y remodelaciones del inmueble

Encontrar una vivienda que esté arreglada y en óptimas condiciones es algo valorado por el comprador. Esta característica contribuye sobre todo al valor comercial de la propiedad.

Zonas comunes y espacio extra

Algunos proyectos facilitan zonas comunes como piscinas, saunas, coworking, parques, gimnasio, entre otros. Todas estas comodidades, como la opción a un parqueadero privado, suman valor a la vivienda.

Reconocimiento del proyecto o la constructora

Algunos proyectos cuentan con cualidades especiales como por ejemplo ser amigables con el ambiente, contar con un diseño arquitectónico especial, entre otros.